Lavar las
cerezas, deshuesarlas y ponerlas en un cazo cubiertas con agua hirviendo unos 4 minutos, escurrirlas y conservar el líquido de cocción. Poner las
cerezas en una fuente. Medir 2,75dl de agua y mezclar con 175g de azúcar. Calentar lentamente hasta que se disuelva el azúcar, añadir el carmín, hervir y verter sobre las
cerezas. Dejar reposar 24 horas. Al 2º día, colar el almíbar en un cazo con 50g de azúcar y hervirlos revolviendo. Echar sobre las
cerezas y reposar 24 horas. Repetir la operación 4 días más. El 8º día retirar el almíbar a las
cerezas y mezclar con 75g de azúcar. Acercar al fuego y retirar cuando hierva. Añadir las
cerezas y cocer lentamente 3-4min. Volcar en la fuente y reposar tapado 48h. El 10º día repetir lo del 8º y dejar reposar 4 días. Escurrir las
cerezas y ponerlas a secar en una rejilla.
Esta es la fórmula tradicional de glasear y confitar fruta. Las diversas cocciones tienen por objeto sustituir el agua de la fruta por el almíbar. Pero si no se tiene tiempo, se pueden cocer las
cerezas en un almíbar espeso y, cuando éste las envuelva bien, pasarlas por azúcar glas y dejarlas secar sobre una rejilla.