Para hacer la salsa. Pon el queso en un cuenco y aplástalo con un tenedor hasta que la textura sea suave. Añade la mayonesa, la nata y bátelo todo. Escurre la
piña y trocéala de modo que queden pedazos muy pequeños. Añade la
piña al queso, mézclalo todo bien y sazónalo con sal y pimienta. Trasvásalo todo a un plato para servir, esparce unos cuantos cebollinos y déjalo enfriar durante una hora. A la hora de servir, pon el plato de salsa de queso en el centro de otro plato más grande y coloca las hortalizas alrededor.
Este es un plato ideal para fiestas o como aperitivo. Las hortalizas hacen que sea un plato saludable.