Limpia el
brócoli y hiérvelo tapado en un poco de agua salada. Para la salsa, derrite la mantequilla y añade la harina. Agrega 250 ml del caldo del
brócoli y mézclalo con 250 ml de leche. Mézclalo bien y déjalo cocer hasta que esté suficientemente espeso. Añade el queso rallado, la nuez moscada molida y la sal. Pon el
brócoli en un bol y cúbrelo con la salsa. Adórnalo con mitades de huevo duro y aceitunas y sirve.
Puede servirse como entrante o con patatas hervidas como comida ligera y sabrosa.