Pelar las
naranjas retirando la parte blanca pegada a la piel y cortar ésta en juliana muy fina. Pesar la juliana; deben quedar unos 150 g. Ponerla a remojo en agua muy fría para que pierda su amargor y dejarla reposar en la parte baja de la nevera unas 12 horas. Escurrir bien la juliana y ponerla en una cazuela. Añadir su peso en miel y cocer durante 30 minutos a fuego lento. Añadir las
almendras y los
pistachos picados, mezclando bien. Dejar cocer 15 minutos a fuego suave, sin dejar de remover. Retirar del fuego y formar unas bolas del tamaño de una nuez. Dejarlas enfriar y pasarlas por el azúcar. Picar las
cerezas y adornar las bolitas.