La alcachofa es un producto muy perecedero que no puede almacenarse durante largos periodos. Con temperaturas entre 0-1ºC y una humedad del 95% únicamente se conservan entre 15 y 30 días. Si se hace preenfriamiento y se usan plásticos se llegan a conservar hasta 45 días. Se ha comprobado que el uso de atmósferas modificadas mejora la conservación, disminuyendo el marchitamiento y el pardeamiento de las hojas protectoras, pero no es frecuente su uso a nivel comercial.

La operación de preenfriamiento no suele realizarse en el caso de las alcachofas, aunque este producto se beneficia de un descenso rápido de las temperaturas hasta 0-4ºC. Entre los métodos posibles el uso de agua helada es el mejor. También es interesante el enfriado por vacío. Otros métodos menos usados son el aire húmedo forzado y el preenfriamiento en cámara frigorífica.

La alcachofa es un producto que no suele almacenarse por la pérdida de calidad que sufre y por motivos económicos. Además presenta una elevada perecibilidad, por lo que su conservación es problemática. A temperaturas entre 0 y 1ºC y con una humedad del 95% el periodo de conservación es de sólo 15 a 30 días. Si se hace preenfriamiento y se usan plásticos este periodo se puede alargar a 45 días.

El uso de atmósferas modificadas ha sido estudiado por diferentes autores y los resultados obtenidos son positivos. Con unas condiciones de 1ºC, 85-95% de humedad, un nivel de oxígeno del 2% y de dióxido de carbono del 3-4% se han almacenado durante 4 semanas alcachofas de la variedad ‘Blanca de Tudela’. Con esta técnica se consigue un menor marchitamiento, pérdida de peso, sensibilidad al frío y alteraciones en las hojas protectoras del capítulo.

El transporte de las alcachofas debe hacerse a temperaturas inferiores a 10ºC y humedades altas. La distribución es conveniente hacerla a menos de 20ºC con humedad media.

El transporte de las alcachofas se debe hacer a temperaturas bajas, siendo lo ideal 0ºC y un 95% de humedad. No obstante, se admite una temperatura de 10ºC si el viaje dura entre 2 y 3días.

La distribución debe hacerse a temperaturas inferiores a 20ºC, con una humedad media y una aireación débil.

Entre los problemas más frecuentes durante la conservación de la alcachofa están determinadas alteraciones como la pérdida de peso, marchitamientos o la aparición de colores extraños. Entre las enfermedades la más importante es el hongo Botrytis cinerea.

Las alcachofas son un producto muy perecedero que puede sufrir diversos problemas durante su conservación, como alteraciones fisiológicas y enfermedades. Entre las alteraciones están:

Marchitamientos producidos por pérdida de agua, lo que se puede evitar o reducir manteniendo una adecuada humedad y envases cerrados.

Pérdida de peso: se produce básicamente por pérdida de agua. En unos 7 días es peso puede reducirse en un 4%.

Alteraciones del color, apareciendo colores violetas en las hojas protectoras de la inflorescencia y pardeamientos interiores.

Entre las enfermedades se pueden citar las siguientes:

Botrytis cinerea: este hongo es el más importante en la posrecolección de la alcachofa, originando la podredumbre gris. Se manifiesta en las hojas externas y en el pedúnculo. En condiciones húmedas se observan zonas de color pardo rojizo o pardo, húmedas y sin olor. En condiciones secas las lesiones presentan un color pardo oscuro. Finalmente aparece una pelusilla gris sobre estas zonas. Las temperaturas bajas reducen este problema.