Las temperaturas óptimas para su conservación durante 6 ó 12 meses son los 0ºC, dependiendo de la variedad (los dátiles semisecos como "Deglet Noor" y Halawi, tienen un periodo de vida más largo que otros dátiles frescos como "Medjool y "Bardhi").
A -18ºC (0ºF) tienen periodos de almacenajes más largos. El punto de congelación es -15,7ºC (3,7ºF).
La humedad relativa óptima oscila el 70-75%.
La refrigeración es la técnica utilizada para conservar las variedades blandas de dátiles durante dos semanas. Para evitar que los dátiles secos se deshidraten deben almacenarse en lugares frescos y secos, protegidos del sol y del aire. En estas condiciones el periodo de conservación es de varios meses e incluso un año.
Los productos frescos consumidos en la actualidad se someten a un proceso de conservación inmediatamente después de la cosecha, ultracongelándose allí mismo, para después descongelarlos justo antes de ponerlos a la venta. Los dátiles así tratados no resultan casi dañados porque contienen muy poco líquido y mucho azúcar (hasta un 70% del total es azúcar invertido).
Los dátiles maduros no son apenas influenciados por el etileno pero realmente pueden absorber el aroma de algún otro producto. Los dátiles no deberían ser almacenados junto a ajos, cebollas y patatas.
El almacenamiento en atmósferas controladas con nitrógeno (excluido el oxígeno) reduce las pudriciones de los dátiles y previene las infecciones de insectos.
Para más información consultar la página Web de la Universidad de Davis (
http://postharvest.ucdavis.edu )