Beneficios para la salud
El chalote es un alimento pobre en proteínas, lípidos y vitaminas, aunque aporta minerales importantes como el fósforo, flúor y potasio.
El principal componente del chalote es el agua. Aporta también hidratos de carbono, mientras que las proteínas y los lípidos se encuentran en muy baja proporción, por lo que es un alimento bajo en calorías.
Su contenido en vitaminas es bajo, aunque aporta minerales importantes para el correcto funcionamiento del organismo, como el fósforo, el flúor y el potasio. El fósforo es imprescindible para el cerebro y la memoria, la formación del esmalte dental y la regulación de los sistemas muscular y nervioso. El flúor previene la caries dental y disminuye los procesos de pérdida ósea del organismo. El potasio es diurético y necesario para la transmisión del impulso nervioso y la actividad muscular.
Tradición popular
El chalote es considerado un alimento remineralizante, aperitivo y estimulante. Sus aplicaciones son principalmente en la cocina, y tiene pocos usos como planta curativa.
El chalote se considera un alimento remineralizante, aperitivo y estimulante. En Roma y Grecia era considerado un fuerte afrodisíaco.
Como planta medicinal tiene pocas aplicaciones y se usa sobre todo en cocina por su sabor aromático para dar un toque refinado a los alimentos.